El aficionado agresivo
En un juego de béisbol, uno de los jugadores salió corriendo a recoger la pelota, que se había metido entre el público. Saltó tan repentinamente y tan alto que asustó a uno de los aficionados. Este reaccionó de mala manera y por instinto, así como por el susto, terminó dándole un puñetazo al jugador.
El momento fue captado en esta imagen, que aunque se ve graciosa, fue un momento doloroso para el que recibió el golpe, y de vergüenza para quien se lo dio. Es una anécdota de la que, seguramente, ninguno se olvidará jamás, pues no es habitual que algo así suceda.